La práctica de sexo anal se extiende en España

El sexo anal o sodomía es una práctica cada día más extendida en nuestro país. Actualmente se calcula que un 40 % de las parejas heterosexuales han practicado este tipo de relaciones sexuales en algún momento y un 10-20 % lo práctica con asiduidad.

CRISTO RODRÍGUEZ

En la población homosexual es una práctica muy extendida, pero cada día muchas parejas heterosexuales rompen el tabú existente respecto a este tipo de prácticas y comienzan a disfrutar de los placeres anales.

Al igual que la vagina, el ano está lleno de inervaciones nerviosas que hacen que sea placentero el uso de dicha cavidad. La relación anal puede ser disfrutada tanto por las mujeres como por los hombres. En el caso de los hombres este tipo de experiencia es todavía más placentera, debido a que a la cantidad de inervaciones que posee el ano se le une la capacidad de estimulación de la próstata.

El sexo anal no solo consiste en la introducción del pene por el ano, sino que también es posible disfrutar con la introducción de consoladores, dildos, bolas chinas, dedos, etc. Al ser una práctica dolorosa es necesaria que el deseo de realizarlo sea mutuo, a la vez hay que tener mucha paciencia, cuidado y es recomendable la utilización de lubricante para que la penetración sea fluida y lo menos dolorosa posible.

La penetración anal tiene más peligro de contraer enfermedades de transmisión sexual (ETS) debido a que hay más peligro de rotura de la mucosa y que el contacto con material fecal también es susceptible de transmitir enfermedades. Por este motivo es recomendable la utilización de preservativos, no solo en el pene sino también en todos los “juguetes” que utilicemos, incluso con la pareja estable.